Ashlee K
Blanco natural arriba y abajo
Ashlee decidió probar Pop On Veneers porque le faltaban molares, tenía huecos visibles y manchas que hacían difícil sonreír. Todo el proceso duró sólo unas tres semanas, y la garantía de 30 días con hasta dos repeticiones fue especialmente tranquilizadora. Cuando llegaron las carillas, encajaban a la perfección e incluso cubrían toda la parte posterior, lo que supuso un cambio radical. Ashlee dice, "Lloré, literalmente. Lloré en cuanto me vi sonreír de nuevo. Ha pasado tanto tiempo". Uno de los aspectos más destacados es lo asequible que era todo lo que Ashlee llama "literalmente centavos por toda tu confianza de nuevo". Ahora Ashlee anima a cualquiera que esté indeciso a que lo haga y vuelva a sentirse guapa.